Nacido en Abril de 1990 en Reims, Francia, de madre francesa y padre libanés, descubrí la pasión por la fotografía y los viajes cuando cumplí veinte años. Desde entonces, pasé casi tres años de mi vida viajando con mi cámara fotográfica como mi único compañero. Cuarenta países y miles de kilómetros recorridos por el mundo, desde los picos nevados de Nepal hasta las playas cálidas de Ghana, desde las orillas del Amazonas en Perú hasta las orillas del Gange en India, pasando por los rascacielos de Nueva York, el Corcovado en Río de Janeiro hasta las estepas de Mongolia. En cada viaje, traté de capturar a través de mi cámara, en 125 fracciones de segundo, momentos de la vida cotidiana, emociones y sentimientos plasmadas en imágenes, poniendo al humano como centro de mis fotografías. No se trataba de tomar una foto de lo que quería mostrar, sino de capturar lo que vi.

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   Fue en Agosto del 2010 que hice mi primer viaje, una aventura a través de Europa en tren durante un mes, sentí por primera vez la total libertad que ofrece un viaje, de descubrir nuevos lugares, nuevas culturas, pero también el descubrimiento de uno mismo, porque es obvio que todos estos viajes me cambiaron a su manera y me hicieron quien soy hoy. Pero fue especialmente durante este viaje que nació el deseo y la necesidad de capturar al humano a través de mi cámara. Un deseo de mostrar que, si los países tienen fronteras y el color de la piel o la cultura a veces cambian, las emociones siguen siendo las mismas. En cada país, está la luz del sol, la infancia despreocupada, la sabiduría de la vejez y la belleza del amor.

 

   En Octubre del 2016, me embarqué en un viaje de poco más de un año y 42 000 kilómetros, desde Katmandú en Nepal hasta París en Francia, trazando mi ruta a través de países, ciudades y culturas. Este viaje pronto será plasmado en un libro, ofreciendo las mejores fotografías de mi recorrido, día a día, desde el primero hasta el último. En Noviembre del 2018, fue Sudamérica, siendo más preciso en Colombia, donde inicié una nueva aventura que me llevó, 397 días de viaje y más de 40 000 kilómetros después, al pie del Corcovado de Río de Janeiro en Brasil. Un viaje por el continente sudamericano durante el cual absorbí una cultura latina que no me ha abandonado desde entonces.

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   En agosto de 2020, tras la explosión en el puerto de Beirut, decidí instalarme en Líbano y testimoniar, a través de mis fotos, la vida cotidiana de este país sumido en una crisis humanitaria, política y económica. Un testimonio que dará a luz a mi primer libro de fotografía "Beirut, de las cenizas a la ira, una historia del Líbano" lanzado en junio de 2021. Es también desde este país que empiezo a trabajar como fotoperiodista y a realizar mi primera foto o escrito reportajes para diversos medios, locales o extranjeros. Este trabajo como fotoperiodista me llevará también a Afganistán donde fui en noviembre de 2021 con la periodista Inès Gil para contar la situación del país tras la vuelta al poder de los Talibanes. Todavía con base en Beirut hasta el día de hoy, sigo contando el Líbano a través de mis fotos y también preparando proyectos que me llevarán nuevamente a los cuatro rincones del mundo.

 

  Hoy, a través de este sitio, quiero compartir con ustedes un poco de mis viajes en imágenes. Mis fotografías no pretendieron ser tomadas para ser bellas. Muestran la verdad, la vida cotidiana, la vida de personas que están separadas por la distancia pero a la vez tan unidas por las emociones. Aquí encontrarás historias ocultas detrás de cada fotografía, vidas ocultas detrás de cada mirada cruzada, pero sobre todo, encontrarás una gran parte de ellos, de todas esas personas que viven sus días en cada rincón del mundo. Estas fotos fueron tomadas según el viento, según mi historia, mis viajes y mis reuniones, en la esquina de una calle o en el medio de la nada. En cada momento que me pareció hermoso, alegre, triste o simplemente natural, presioné el botón del obturador de mi cámara, tratando de capturar la belleza del mundo incluso en los lugares más tristes, pero también la belleza de las personas que lo habitan.

 

   Espero que, a través de mis fotografías, encuentres un poco de todo esto, de todas estas pequeñas cosas que hacen la vida. No pretendo ser artista, simplemente tuve la oportunidad de ver y vivir hermosas emociones. Solo quiero mostrártelas.

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Florient Zwein